Mengíbar posee una campiña rica y fértil que el hombre ha sabido aprovechar desde la antigüedad como demuestran sus antiquísimos asentamientos humanos desde el lejano paleolítico. El paisaje de Mengíbar lo componen interminables olivares cultivados en enormes llanuras y suaves ondulaciones atravesadas por el legendario Guadalquivir.
Mengíbar es un precioso núcleo de población rural de unos 8600 habitantes aproximadamente, donde podemos encontrar maravillas arquitectónicas como su Torre Árabe, la Casa Palacio de los Señores la Chica, Casa de la Inquisición y varias hermosas ermitas, entre otras muchas edificaciones dignas de visitar.
Pero lo mejor de Mengíbar es su gente resultado de este marco geográfico y de un marco histórico y tradicional que hace del pueblo de Mengíbar un pueblo alegre, abierto y amigable. Todo esto hace que sus traiciónales fiestas sean además un punto de encuentro para los vecinos de lo pueblos de alrededor como ocurre en el caso de sus romerías y la gentes de los pueblos de Bailén, Villargordo, Villanueva de la Reina, Jabalquinto, etc.
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